Remesas serán controladas por el régimen
Una nueva disposición de parte del Gobierno ha impuesto un control férreo a las remesas familiares para montes desde US$500. También transacciones monetarias de cualquier índole a partir de US$5,000 y ventas en casas de empeño cuyo monto supere los US$3,000. Todas estos nuevos instrumentos permitirán a la Unidad de Análisis Financiero (UAF) mantener un control estricto sobre los movimientos financieros de los nicaragüenses.
Todas las entidades financieras está ahora obligadas a cumplir con estas disposiciones, sin importar que antes hubiera una ley que mantenía la privacidad de operaciones mediante el sigilo bancario.
Con este nuevo reglamento todos los entes financieros obligados a informar mensualmente a la UAF serán: bancos, microfinancieras, casas de cambio de moneda, casas de empeño, agencias de envíos de remesa, casinos, salas de juegos de azar, comerciantes de vehículos nuevos y usados, corredores de bienes raíces y prestadores de servicios de traslado de valores bienes y activos.
Las remesas son uno de los rubros más importantes para la economía nacional. Chinandega no es una excepción, de hecho ocupa el segundo lugar a nivel nacional en montos recibidos en el rubro de remesas. Con esta nueva reglamentación se obliga a instituciones financieras o no financieras a detallar emisor y beneficiario de las remesas —sean estas personas naturales o jurídicas— por sumas mayores a US$ 500, “tanto en el territorio nacional como fuera”, indica el documento oficial.
El rubro de las remesas implica el ingreso al país de unos 1,500 millones de dólares. Movimientos que generalmente vienen a dinamizar la economía y que para muchos significa un ingreso de supervivencia.
En enero una ley que imponía un impuesto de 15% fue presentado a la Asamblea, pero en ese momento el temor de un nuevo estallido social hizo retroceder al régimen. Aún así se aprobaron varias reformas que golpearon la economía al cambiar drásticamente tasas de impuesto sobre la renta y el incremento de la tasa individual y patronal al Instituto de Seguridad Social.